Alcance y Ayuda a Jóvenes Adultos Es Donde La Comunidad y La Fe Se Encuentran

Posted

Una de las historias de éxito más brillantes de la arquidiócesis en los últimos años ha sido la formación y el desarrollo de su programa Alcance y Ayuda para Jóvenes Adultos, el cual utiliza una sólida red y un toque personal para apoyar el crecimiento social y espiritual de los jóvenes católicos de 21 a 39 años en los 10 condados que hacen parte de la arquidiócesis.

Alrededor de 100 grupos de jóvenes adultos están conectados con la oficina de Alcance y Ayuda para Jóvenes Adultos a través de parroquias y agencias de la arquidiócesis tales como Caridades Católicas o grupos profesionales afiliados, especialmente en la ciudad de Nueva York, muchos de ellos independientemente liderados por artistas católicos, profesionales de las finanzas y tecnología.

Colin Nykaza, director de la oficina Ayuda y Alcance para Jóvenes Adultos, dirige el equipo que reúne a los grupos y las actividades y servicios para jóvenes adultos católicos.

“Nuestro trabajo es servirles y apoyarlos en todo lo que podamos”, dijo Nykaza a CNY en una entrevista la semana pasada.

Nykaza había sido seminarista hasta seis meses antes de que empezara a trabajar para la arquidiócesis hace ya casi ocho años. En ese momento, Alcance y Ayuda para Jóvenes Adultos era parte de la Oficina de Vida Familiar arquidiocesana. Cuando el cardenal Dolan actualizó el programa convirtiendo a Alcance y Ayuda para Jóvenes Adultos en una oficina independiente, y se necesitó contratar nuevos coordinadores.

Mary Elise Zellmer es la directora asistente de la oficina y coordinadora de la Región 1, la cual incluye grupos, programas y actividades en Manhattan y Staten Island.

La Región 2, que incluye los condados de la parte superior de la arquidiócesis, opera bajo el coordinador Luigi Manente; y la Región 3, que incluye el Bronx, gran parte del condado de Westchester y todo el condado de Rockland, pronto contratará a un nuevo coordinador para reemplazar a uno que se mudó recientemente fuera del estado de Nueva York.

Otros miembros del personal son Christy Vaissade, coordinadora principal de logística, y Kaitlyn Colgan, la administradora de la oficina.

Aunque Nykaza dijo que es difícil dar con el número exacto de adultos jóvenes que participan en las diversas actividades y programas que se ofrecen, el señaló que la oficina cuenta con “decenas de miles” en las listas de correo electrónico cuando se combinan con los afiliados. Su sitio web catholicnyc.com es una fuente de información obligatoria para los jóvenes católicos sobre temas que van desde eventos hasta listados de apartamentos y oportunidades para voluntarios. Las páginas de la oficina en Facebook e Instagram además de su cuenta en Twitter también son populares.

“Tenemos muchos portales donde la gente puede encontrar información”, dijo Nykaza.

Una vez que los jóvenes adultos se registran, ellos pueden beneficiarse de un sistema de cuatro categorías diseñado para servirles y para ayudarlos a conectarse entre sí y con Dios.

Los componentes son: Eventos Discípulo, los cuales son oportunidades sacramentales; Eventos de Amigos, que son eventos catequéticos; Eventos de Conocidos, para eventos especiales y oportunidades de voluntariado; y Eventos de Búsqueda, los cuales tienen una naturaleza más secular.

Los Eventos de Amigos, por el simple hecho de hablar de una de las categorías, se centran en darles a los participantes la oportunidad de aprender acerca de su fe a través de eventos como la serie de verano semanal denominada Amor y Responsabilidad, la cual se está precisamente llevando a cabo ahora en la parroquia de la Inmaculada Concepción en Manhattan. Otros ejemplos de la categoría Eventos de Amigos incluyen Theology on Tap, clubes de libros católicos y estudios bíblicos.

Nykaza dijo que la clave es conocer a la persona donde se encuentre e invitarla a la categoría correcta al comienzo de su viaje. Eso puede significar comenzar con una noche de jazz o ayudarle en un baile de graduación para estudiantes con necesidades especiales, y luego pasar a una misa para jóvenes adultos ofrecida por el cardenal Dolan en la Catedral de San Patricio.

“Tenemos una buena idea de dónde se encuentran en su fe”, dijo Nykaza. “El hablar con alguien definitivamente te puede indicar en dónde están”.

Luigi Manente, coordinador de la Región 2, dijo que muchas veces los jóvenes adultos comienzan a asistir a eventos porque “quieren estar en comunidad” con otros jóvenes de edades y experiencias similares. Debido al rango de edad, los participantes pueden ser padres solteros, casados, viudos, divorciados y solteros. Un número razonable son los estudiantes en edad universitaria, quienes tal vez asisten a una universidad sin el ministerio de un campus católico o no están inscritos actualmente.

“Los queremos sea donde sea que estén y caminamos con ellos”, dijo Manente, de 36 años, feligrés de la parroquia de Santa Columba en Hopewell Junction, quien está casado y tiene tres hijos pequeños.

Manente dijo que él y los miembros de los equipos de liderazgo de las diferentes regiones que el supervisa son conscientes de “la forma en que actuamos”, especialmente hacia los recién llegados, de tal forma que se pueda generar confianza.

Las noches mensuales de baloncesto y voleibol que se juegan en Santa Columba en Hopewell Junction son excelentes actividades de iniciación, especialmente para aquellos que no están comprometidos con su fe desde el principio.

“Queremos que nos conozcan como los discípulos que somos”, dijo Manente.

La geografía de los condados superiores de la arquidiócesis es mucho más extensa que la de la ciudad de Nueva York, por lo que hay cuatro comunidades regionales de jóvenes adultos: Credo para Jóvenes Adultos (o Credo Young Adults), para Northern Westchester y Putnam; Cuerpo Católico (o Catholic Corps), para el condado de Orange; Reviviendo a Jóvenes Adultos Católicos, para el Condado de Ulster; e Iniciando Jóvenes Adultos (o Ignite Young Adults), para el condado de Dutchess.

Maribel Brenes, de 28 años, ha servido como miembro del equipo de liderazgo para Credo para Jóvenes Adultos, el cual está localizado en la parroquia de San Patricio en Yorktown Heights. Ahora, como coordinadora de comunicaciones, ella se había desempeñado anteriormente como presidenta del grupo.

Artista gráfica de profesión, la Sra. Brenes aporta su experiencia en el diseño de materiales promocionales y también envía correos electrónicos semanales además de publicar regularmente en las redes sociales.

Ella se involucró con Credo para Adultos hace cinco o seis años después de recibir un correo electrónico de su párroco, el padre Richard Gill, de St. Lawrence O’Toole en Brewster.

“Me ha ayudado a comprender que tan importante es mantener la fe como parte de mi vida diaria”, dijo Brenes, quien también añadió que observar las buenas prácticas de otros miembros ha sido “inspirador” para ella.

Ella dijo que también disfruta de eventos que tienen una nota religiosa como las reuniones mensuales de formación en la fe, así como eventos sociales tales como el día de campo que se celebrará el sábado 13 de julio, incluyendo juegos deportivos y caminatas además de una misa y una barbacoa.

La Sra. Brenes recibió un beneficio especial adicional por su participación. Ella conoció a su novio, Michael Saccomanno, a través de Credo para Adultos, y los dos planean casarse en septiembre.

“Credo nos ha dado más oportunidades de pasar tiempo juntos”, ella dijo. “Como católicos comprometidos con nuestra fe, siempre tenemos esa conexión”.