Obispos Latinoamericanos Piden Acción para Salvar La Selva Amazónica

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Líderes del Consejo Episcopal Latinoamericano pidieron acción internacional para salvar la selva de la Amazonía mientras continúan ardiendo incendios masivos.

“Urgimos a los gobiernos de los países amazónicos, especialmente de Brasil y Bolivia, a las Naciones Unidas y a la comunidad internacional a tomar serias medidas para salvar al pulmón del mundo”, expresaron los principales representantes del consejo, conocido por sus siglas en español como CELAM, el 22 de agosto en un comunicado.

“Lo que le pasa al Amazonas no es un asunto solo local sino de alcance global”, dijeron los obispos. “Si el Amazonas sufre, el mundo sufre”.

La Amazonía produce 20 por ciento del oxígeno del mundo—según los estimados de los científicos.

El instituto de alcance espacial de Brasil, el cual es responsable del monitoreo satelital de la Amazonía, había reportado que el número de incendios forestales, comunes en julio y agosto, habían alcanzado ya un número récord en 2019 con 72,843 incendios detectados.

La agencia espacial de EE.UU., NASA, dio a conocer imágenes satelitales el 21 y 22 de agosto mostrando cómo el humo de los incendios había creado “una capa que es claramente visible a través de gran parte del centro de Sudamérica”.

El presidente francés Emmanuel Macron, les pidió a los líderes mundiales que pongan los incendios como una prioridad en sus agendas al reunirse en Francia para la cumbre del Grupo de los Siete que empezó el 24 de agosto. Entre los participantes están el presidente Donald Trump, Macron y los líderes de Canadá, Alemania, Italia, Japón y el Reino Unido.

El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, ha dicho públicamente que cree que las agencias no gubernamentales—incluyendo las agencias con respaldo católico tales como la Pastoral de la Tierra y el Consejo Indigenista Misionero (CIMI)—están detrás de los incendios ilegales porque se han opuesto a su llamado al desarrollo de la selva. Las organizaciones han negado tajantemente estas acusaciones.

La portada del periódico del Vaticano, L’Osservatore Romano, en su edición del 23 de agosto, destaca dos artículos sobre los incendios en la Amazonía. El primero, titulado “La Amazonía debe ser protegida”, incluyó la cobertura general del alcance de los incendios y la alarma emitida por el secretario general de la ONU, Antonio Guterres. Un segundo artículo informó el comunicado del CELAM con el titular: “Salven el bosque para salvar el mundo”.

En su declaración, los obispos señalaron que en el próximo Sínodo de los Obispos sobre la Amazonía en octubre se debatirá la grave situación que viven los indígenas en esa área así como también la deforestación de la región. El 60 por ciento de la selva amazónica está en Brasil.

“La esperanza por la cercanía del sínodo Amazónico, convocado por el papa Francisco, se ve ahora empañada por el dolor de esta tragedia natural”, expresaron los obispos, y dijeron que a los “hermanos pueblos indígenas que habitan este amado territorio: ‘les expresamos toda nuestra cercanía y unimos nuestra voz a la suya para gritar al mundo por la solidaridad y la pronta atención para detener esta devastación”’.

Y mientras la deforestación del mayor bosque tropical del mundo y la violencia contra el pueblo indígena allí, han sido una gran preocupación para la Iglesia Católica, el próximo sínodo también ha ocasionado inquietud en el gobierno de Bolsonaro.

En febrero, el gobierno brasilero se vio obligado a negar que estaba espiando, por medio de su agencia de inteligencia, ABIN, a los obispos y sacerdotes más progresistas que están trabajando en el sínodo.

El gabinete de seguridad institucional del gobierno, conocido como ISC, sin embargo, admitió que estaba preocupado en que este encuentro se utilice para criticar la posición de la administración Bolsonaro sobre el medioambiente y los derechos de los indígenas.

“No hay críticas generales de la Iglesia Católica. Existe la preocupación logística del jefe de la oficina de seguridad institucional del Ministro de Estado por algunos asuntos de la agenda del sínodo de la Amazonía que se llevará a cabo en octubre de este año en el Vaticano”, dijo un comunicado de ISC en ese momento.

Los obispos del CELAM, repitiendo las palabras del papa Francisco en su homilía en la ceremonia inaugural en marzo del 2013, requirió “pedir, por favor, a todos los que ocupan puestos de responsabilidad en el ámbito económico, político, social, a todos los hombres y mujeres de buena voluntad: [que] seamos custodios de la creación, del designio de Dios inscrito en la naturaleza, guardianes del otro, del medio ambiente; no dejemos que los signos de destrucción y de muerte acompañen el camino de este mundo nuestro”.

La declaración fue firmada por el arzobispo Miguel Cabrejos Vidarte, de Trujillo, Perú, presidente del CELAM, así como también por otros representantes de la organización. —CNS