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El cardenal Dolan recordó a los fieles que se reunieron en la iglesia de St. Raymond en el Bronx con motivo del primer “Sábado de la Misericordia” de la arquidiócesis que no se desesperen por culpa del pecado.
“Nos podríamos preguntar, ‘¿Qué es la misericordia?’”, dijo el cardenal mientras conducía la primera de una nueva serie, los Sabados de la Misericordia el 20 de febrero. “Misericordia, escúchenme todos, es el compasivo, personal, tierno, eterno y piadoso amor de Dios”.
Los “Sábados de la Misericordia” marcan el Año Jubilar de la Misericordia, el cual fue convocado por el Papa Francisco y que se extiende hasta el 20 de noviembre, en la fiesta de Cristo Rey.
El cardenal también describió la misericordia de dos formas: en primer lugar, “la misericordia de Dios para nosotros”, y en segundo lugar, “nosotros mostrando misericordia hacia los demás”.
“La misericordia de Dios para nosotros”, dijo el cardenal, “es la fuerza más poderosa en el mundo. No hay pecado que no se desintegre en la cara de la misericordia de Dios”.
“Sólo hay una fuerza superior a su misericordia, y es nuestro libre albedrío, porque tenemos la libertad de pedir y aceptar su misericordia, o de ignorarla y descartarla”.
Si bien es cierto que no merecemos la misericordia de Dios ni podemos ganarla o merecerla, dijo el cardenal, “si contamos con un gran abogado”, el agregó, “tenemos un mediador fenomenal. Tenemos a alguien que va al juez y dice: Yo me encargo de la sentencia de esta persona. Voy a tomar los pecados de esta persona como si fueran míos y voy a repararlos... Voy a redimir a este pecador de su yugo. Voy a salvarlo de su castigo”.
Concluyo el cardenal: “Nuestro abogado, nuestro mediador, la víctima por nuestros pecados y quien pago su precio y abrió la puerta de la celda de la cárcel se llama Jesús”.
Misericordia, enfatizó el cardenal, es el “regalo de que usted pueda pedir” que Jesús nos hace.
El cardenal continuó con el tema de la misericordia tres horas después durante la homilía de la misa de vigilia bilingüe que celebró en St. Raymond para el Segundo Domingo de Cuaresma.
Casi 600 personas asistieron a la misa y más de 400 asistieron al programa de la tarde, según monseñor John Graham, párroco de la parroquia de St. Raymond.
También estuvo presente el obispo auxiliar John Jenik, párroco de la parroquia de Nuestra Señora del Refugio en el Bronx quien es también vicario episcopal del Bronx, Manhattan del Norte y Central Harlem. Veinticinco sacerdotes representando las 19 parroquias de la arquidiócesis estuvieron presentes.
El cardenal Dolan, el obispo Jenik y entre los muchos sacerdotes que dieron el sacramento de la reconciliación a los penitentes. El obispo Jenik presento el examen de conciencia en español.
“La gente estuvo muy satisfecha”, dijo monseñor Graham. “Ellos pensaron que era como un mini-retiro, con todo tipo de piezas en movimiento”.
El se refería a la orden del día, la cual incluyo la exposición del Santísimo Sacramento; oración; la conferencia del cardenal; un examen de conciencia y la oportunidad de recibir el sacramento de la reconciliación; el rezo del Rosario y la Coronilla y Novena a la Divina Misericordia; Bendición con el Santísimo, y misa.
El padre Juan María Devaney, OP, uno de las misioneros de la caridad nombrado por el Papa Francisco el Miércoles de Ceniza en Roma, dio una charla titulada “Testigo de la Misericordia” en la parroquia de St. Raymond, dirigió el examen de conciencia en inglés, así como la Coronilla y Novena a la Divina Misericordia y el Rosario, y también escucho confesiones. El sacerdote dominicano está asignado a la parroquia de San Vicente Ferrer en Manhattan y trabaja en la capellanía del hospital para la Pastoral de la Salud Hermanos Dominicana de Nueva York.
Otro misionero de la Misericordia, el padre Arlen Harris, O.F.M. Cap., residente en la parroquia del Buen Pastor en la sección de Inwood de Manhattan, también asistió al “Sábado de la Misericordia” en St. Raymond y escuchó confesiones en español.
Testimonios sobre el suministro y el impacto de las obras de misericordia corporales también fueron compartidos.
La reunión concluyó con una recepción y refrescos en el gimnasio de la escuela primaria donde el cardenal saludó a los asistentes.
El próximo “Sábado de la Misericordia” se llevará a cabo el 12 de marzo en la iglesia de Nuestra Señora de la Piedad en el 1616 Richmond Ave. en Staten Island.
“Sábados de la Misericordia” se ofrecerán en otras áreas de la arquidiócesis una vez en abril y dos veces después en dos fechas en el otoño.
El cardenal Dolan conducirá cada uno de los “Sábados de la Misericordia”, los cuales seran en inglés y español.
Las reuniones comienzan a las 2:30 p.m. y están abiertas al público; miembros de las parroquias en el área están invitados a asistir y no se requiere registro.
